La edición textual en Guatemala ha sido un oficio que se ha ejercido por muchos siglos. Si bien es cierto que se tiene la creencia de que se trata de una labor actual, en realidad se popularizó en gran medida por la presencia de la imprenta en el país.
Historia de la edición textual en Guatemala
La edición de textos se remonta al siglo XVII, cuando a la Capitanía General de Guatemala llegó la primera imprenta e impresor del reino, José de Pineda Ibarra. Según registros, esta se instaló en julio de 1660 en el Portal del Ayuntamiento —ubicación donde se ubica el Museo del Libro Antiguo—.

Descripción de la foto para personas con discapacidad visual: ilustración de un apersona realizando una impresión artesanal. (Crédito de foto: Orgullo Guatemalteco)
Cabe destacar que la relación de la actividad editorial está vinculada con la necesidad de la revisión de los textos. Al momento, no existían formas de corrección y, muchas veces, agregar tildes o elementos se hacía a mano.
Hasta 1715, José de Pineda Ibarra y su hijo (Antonio) eran los únicos impresores del Reino de Guatemala. Sin embargo, poco a poco se instalaron nuevas a partir de 1730 a 1800. Poco a poco, nacieron los periódicos y, con ellos, más editores.
La evolución de la edición textual en Guatemala
Cabe destacar que la corrección era pensada a nivel ortográfico. Con forme se establecieron carreras y reglas claras en el uso del español, se amplió la edición a nivel de “estilo”.
José María Reyna Barrios adquirió la Imprenta Modelo y decidió convertirla en la imprenta nacional —más tarde, se le conoció como Tipografía Nacional—. Esta fue la primera institución en editar autores nacionales de gran nombre como lo fueron Clemente Marroquín Rojas, Miguel Ángel Asturias y Enrique Gómez Carrillo.
Sin embargo, el desarrollo editorial se vio afectado con la llegada de Manuel Estrada Cabrera y Jorge Ubico. El estancamiento se dio derivado de la poca producción editorial y literaria que se vio cooptada por ambos presidentes.
La edición textual y editorial en la actualidad
Luego de la Revolución de 1944, se introdujo un programa de desarrollo cultural en donde se buscó la manera de acercar material nacional y extranjero a precios accesibles. A su vez, en esta época se fundó la Editorial Piedra Santa en el país.
Poco a poco, los proyectos editoriales surgieron y, con ellos, editores en búsqueda de autores guatemaltecos con ganas de publicar. De esa cuenta, en 1978 se fundó la Editorial RIN-78 —por parte de varios estudiantes de la Universidad Rafael Landívar—.

Descripción de la foto para personas con discapacidad visual: vista de Miguel Ángel Asturias en un retrato a contra luz. (Crédito de foto: Nodal Cultura)
Ya para 1993 se fundó F&G Editores. Pero, el parte aguas de la creación literaria, editores y actividad editorial se ha realizado durante el siglo XXI. Esto especialmente por la difusión a gran escala a través de los medios de comunicación masivo y la aparición de editoriales independientes.
Datos curiosos
- Solo en las décadas de 16600 a 1800 se publicaron alrededor de 354 libros que van desde religioso, educativo e histórico.
- Uno de los primeros textos publicados en Guatemala fue Explicatio apologética de Enríquez de Ribera.
- Juana Martínez Batres fue la primera mujer en la historia de Guatemala en trabajar en un taller de impresión y editora del país.
Referencias
- Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes. La edición en Guatemala. Consultado el 14 de marzo de 2022, de https://bit.ly/3q3RVNA
- Cooperación española conocimiento / La Antigua. El sector del libro en Guatemala. Consultado el 14 de marzo de 2022, de https://bit.ly/3i9Q9pM